Empecemos por la ubicación, que es crucial. En un dormitorio pequeño, primero tienes que tener en cuenta la configuración de la habitación y el espacio disponible para la instalación de un vestidor. Un dormitorio cuadrado no tiene los mismos problemas de espacio que un dormitorio largo o un dormitorio bajo una cubierta inclinada.
El mueble principal de esta habitación sigue siendo la cama, por lo que el vestidor debe encajar en el espacio sin obstruir la circulación alrededor de este mueble. Si quieres sentirte como en casa en tu pequeño dormitorio, lo primero que debes pensar es dónde colocar la cama: ¿junto a la ventana? ¿frente a la puerta? Depende de la persona y de las posibilidades de la habitación, pero esta decisión es esencial. Una vez que hayas decidido dónde quieres colocar tu cama, ¡puedes empezar a buscar el lugar ideal para tu armario!